¿Son tus PENSAMIENTOS LIMITANTES?

 Muchas veces pensamos que cuando no logramos lo que nos proponemos es debido a los obstáculos que se nos presentan en la vida: las personas, el clima, la edad, el color de piel, las circunstancias y pare usted de contar. Siempre miramos hacia afuera y muchas veces  damos por sentado que nuestros límites son externos, ajenos a nuestra  voluntad,  pero quiero decirte hoy que eso no siempre es del todo cierto.

 Quizás, si pueden existir obstáculos externos, pero los más fuertes de todos son los que provienen de ti, de tus pensamientos y creencias limitantes ¿son tus pensamientos limitantes? Aunque lo sean lo bueno es que se pueden vencer y cambiar.

 ¿Qué son pensamientos limitantes?

 Son ideas, estructuras de pensamientos o creencias,  que están alojadas y generalizadas  en la  mente de la persona, estas se han creado con los años y aunque no sean ciertas,  al pensar, sentir  y actuar,  lo hace en función de esos paradigmas. En consecuencia, si esos pensamientos o creencias son negativos, se convierten en un impedimento para el  avance y crecimiento en  las diferentes facetas de tu vida, ya que bloquean tu crecimiento y desarrollo como persona y el logro  de tus  sueños y metas.

 ¿De dónde provienen los pensamientos limitantes?

 Estos se instauran mayormente en  la infancia, productos de los mensajes y actitudes ante la vida de las figuras parentales (es decir, papá mamá, abuelos etc.), también de los  compañeros de clases, amigos y personas que nos rodeaban. También nosotros  por nuestros miedos a enfrentar cambios en la vida que vamos  creando muchos pensamientos limitantes. 

 Lo más probable es que te dijeron muchas de las cosas que se convirtieron en esas creencias y programaciones mentales, estas se fijaron en tu cerebro como si fueran una verdad absoluta que hoy no te permiten desarrollarte como quieres y que tu cerebro cree.  Este se acopla a la información que le das,  si le dices que no eres capaz de hacer algo, él te creerá y hará cualquier cosa para complacerte, también ocurre con lo contrario. Los pensamientos tienen poder  sobre nosotros, influyen en todo lo que sentimos y hacemos, tanto positiva como negativamente.

 Ejemplos de algunos pensamientos limitantes: 

• “Ya a esta altura de mi vida no aprenderé a manejar la tecnología, soy muy vieja para eso”.

• “Sólo las mujeres hermosas pueden mantener un hombre a su lado”.

• “Nadie se fijará en mí; seguramente me dirá que no o se aburrirá de mí”.

• “No merezco todo esto…”.

Algunas de esas creencias sólo se han dado por una única experiencia, Por ejemplo:

• “En una ocasión intenté subir por allí y no logré hacerlo, no soy buena escalando”.
• “No sé hacer tortas, la vez que lo intenté se me quemó”.

Y así como esos podría escribir una lista interminable de pensamientos limitantes que obstaculizan el desarrollo de muchas personas en el mundo en diferentes áreas de vida. La buena noticia es que si podemos cambiar esos pensamientos y creencias.

Recuerda, la neuroplasticidad de nuestro cerebro es potente.  Tenemos la capacidad de desaprender y reaprender  nuevas concepciones, creencias, hacer cambios en las estructuras de nuestro pensamiento y superar los pensamientos limitantes.

¿Cómo vencer a los pensamientos o creencias limitantes? 

1. Detecta y escribe la creencia que te limitan  

 Busca, indaga en tus pensamientos y creencias y encuentra esos pensamientos limitantes que no te permiten avanzar, luego que ya sepas cuáles son, ponlos por escrito. Si aparece algún otro añádelo a la lista.

2. Comprende que no es una realidad

 Esas creencias son  para ti una realidad aunque no sea así. Es bueno comprender que es algo que tus pensamientos han creado basándose en tus miedos e inseguridades y lo han convertido en algo importante, pero restrictivo para ti. Pero puedes cambiarlo, puede comenzar por entender que no es REAL. Sólo está en tus pensamientos.

3. Cambia o sustituye tus  pensamientos limitantes

 Cada vez que te llegue un pensamiento o te topes con esa creencia de que no eres capaz de hacer algo o de ser algo, al no sentirte merecedor de amor, de cariño o no creerte apto para realizar cualquier cosa en tu vida, piensa en todo lo contrario. Sustitúyelo, te daré un ejemplo utilizando uno de los anteriores: “Ya a esta altura de mi vida no aprenderé a manejar la tecnología, soy muy vieja para eso”; ahora podría ser: “A cualquier edad estamos aptos para aprender, no hay edad para adquirir conocimiento porque todos los días se aprenden cosas buenas, así que si puedo”. 

4. Pon en práctica las sugerencias

 Si lo que te mencioné lo pones en práctica cada vez que te vengan pensamientos limitantes, los escribes, comprendes que es una realidad que sólo creas en tu mente y lo sustituyes por un pensamiento positivo de seguro que podrás derrumbar todo lo que no te permita avanzar.

5. Busca ayuda profesional

Siempre es bueno contar con el apoyo de un profesional. A veces, las creencias limitantes se han acumulado tanto y durante mucho tiempo, que si no nos tomamos el espacio para trabajar en nosotros mismos, quedamos atrapados en los miedos y en el “yo no puedo, no sé, no tengo”.  Si te das cuenta  que esto es lo que te ocurre a ti y quieres ayuda profesional especializada para superarlo  no dudes en contáctarme.