¿Eres adicto a los AMORES TÓXICOS? ¿Cómo saberlo?

¿Te ha pasado que conoces a una persona muy atractiva, inteligente, profesional que tiene como pareja o está perdidamente enamorada de alguien  que  no la  valora, ni respeta? Su pareja podría ser una persona con fobia al compromiso o casado, la maltrata psicológica y/o físicamente, tiene problemas con el alcohol o las drogas.  ¿Conoces a alguien similar? ¿O es tu caso? Si es así sigue leyendo que sé que te será útil este artículo y conoce que es ser adicto a amores tóxicos. 

  Las personas adictas a amores tóxicos…

 Son personas que le entregan  todo su «amor», atención, energías, tiempo, recursos y su vida a esa pareja que  no  cubre sus expectativas, ni les corresponde de manera sana, no las valora, ni las respeta (Esta comprobado estadísticamente que son más las mujeres que los  hombres que la padecen).

 La génesis de su adicción o dependencia afectiva tiene sus bases en su baja autoestima, la soledad y  su dolor emocional infantil. Se le conoce también con los términos de: “Las mujeres (también aplicable a los hombres) que aman demasiado”, relaciones amorosas tóxicas,  afectivo-dependiente o adicción a relaciones  inadecuadas o enfermas.

  ¿Cómo son los  adictos a las relaciones tóxicas?

 Generalmente las personas adictas a amores tóxicos son problemáticas y conflictivas, o  muy aguantadoras  en sus relaciones de pareja.  Generan dependencia emocional con individuos de los siguientes perfiles: violentos, flirteadores, infieles, drogadictos, alcohólicos y/o sexólicos.

 Buscan incansablemente un poco de «amor», por el cual pagan un precio emocional muy alto: más dolor, soledad y depresión,  a este tipo de personas, si alguien estable y agradable se les acerca, les parecerá  fastidioso, insípido y aburrido.

 Las personas adictas a amores tóxicos vienen de hogares disfuncionales

La mayoría de las mujeres y hombres que sufren esta patología vienen de hogares disfuncionales, han crecido sin padre o sin madre; puede ser que con ambos padres o alguno de ellos, quizás sus padres hayan sido abandonantes en sentido emocional y/o físico, haya tenido alguna adicción al alcohol o las drogas; también pudieron ver el maltrato de su padre a su madre o viceversa; algunos han sido  abusados sexualmente en su infancia o han recibido  maltratos de sus padres, allegados o persona de autoridad en la infancia. Generalmente no recibieron afecto cuando eran pequeños, ni besos, ni abrazos, ni reconocimientos, no les hicieron sentirse aceptados, valorados, aprobados, ni reconocidos.

 ¿Cómo identificas que eres adicta a amores tóxicos? 

• Cuando amar a alguien significa sufrir y la relación está guiada por el dolor e inestabilidad. Le aterra que la abandonen, por eso hace cualquier cosa para evitar que una relación se disuelva, hasta mendigar el amor, permitiendo cualquier tipo de irrespetos y abusos.

• Las energías, fuerzas, tiempo están dirigidas sólo a la persona, incluso abandonando  otras cosas que deberían ser más importante, incluyéndose.

•  Se fijan en personas con patrones de crianza muy enfermos, por ejemplo: personas que son alcohólicas, sexópatas, drogadictas, hombres casados, golpeadores, distantes o abandonantes. En el caso menos extremo se enamoran solos o de alguien que no les conviene para nada.

• Si conocen a alguien que las ame de verdad, le brinde estabilidad, seguramente no le atraiga y le parezca fastidioso y aburrido.

• Son personas en lo general, emprendedoras, profesionales, con habilidades y aptitudes, pero prefieren estar acompañadas de otro de menos nivel profesional, intelectual y como ya he mencionado más enfermo  emocional y psicológicamente que ellas.

• Tienen baja autoestima, sentimientos de inferioridad que no les permite ser felices o creer que se merecen una persona mejor.

• Tienden a ser personas controladoras, celosas y manipuladoras para mantener al lado a su droga (hombre o mujer en cuestión).

• Se hace responsable del  casi 100% de la relación.

Generalmente provienen de hogares disfuncionales, tienen una gran carencia de afecto, contacto, y expresiones de afecto y reconocimiento, por eso es que se conforman con las migajas de «amor» que reciben. Acostumbradas a la falta de amor en las relaciones personales, están dispuestas a esperar, conservar esperanzas y esforzarse más para complacer, con la esperanza de obtener el amor y llenar el vacío que traen desde la infancia

¿Por qué se les llama adictos  amorosos? 

Aunque suene fuerte la palabra adicción, si lo son, a hombres y mujeres inaccesibles. Así como el alcohólico y el drogadicto no se curan hasta que admiten que están enfermos, toman  conciencia de que solos no pueden curarse, buscan ayuda profesional y  hacen todo sus esfuerzos  por sanar,  una persona que ama demasiado, adicta o apegada emocionalmente, debe tratarse con un especialista en salud mental, no porque está loco, es porque está enfermo.

¿Se pueden sanar la adicción amorosa?

Por supuesto que sí. Trabajando en terapia los conflictos emocionales generados en su infancia, desaprendiendo esos  patrones disfuncionales, desarrollando su  amor y respeto propio,  logrando desarrollar una relación amorosa, estable, tranquila y paz consigo mismo y estableciendo una  relación de pareja sana emocionalmente. Sin mendigar el amor, sin rogarlo, sin buscar la lástima o manipular al otro para que se quede  en la relación. Amar desde la alta autoestima, desde el merecimiento. Se puede lograr. Si te consideras adicto a relaciones tóxicas y quieres sanar contáctame.